Se refiere al procedimiento para esterilizar un hombre, donde se cortan, ligan y cauterizan los conductos que llevan los espermas desde los testículos para ser eyaculados posteriormente.

Esta destinado a controlar de forma permanente la reproducción. Es un procedimiento sencillo realizado sin bisturí con anestesia local, con una relativamente baja complejidad, ambulatorio con una recuperación sumamente rápida. A los 3 días posteriores al procedimiento el paciente puede incorporarse a sus actividades con limitaciones como deportes de montar.