Esta es la última opción para el paciente. Es un tratamiento correctivo para la disfunsión eréctil, después de haber probado diferentes tratamientos.
La cirugía consiste en sustituir el tejido eréctil por dos bombas con un sistema hidráulico que se colocan dentro de los cuerpos cavernosos. Se coloca una válvula en el escroto a partir de la cual el paciente puede activar o desactivar la prótesis de acuerdo a su necesidad.
La opción quirúrgica se ha convertido en una terapéutica muy efectiva para pacientes que han quedado con disfunción eréctil posterior a cirugías de próstata.