Comencemos hablando de los riñones:
Los riñones son dos órganos con forma de frijoles, aproximadamente del tamaño del puño de una mano. Están ubicados cerca de la línea media de la espalda, justo debajo de la caja que conforman las costillas. Dentro de cada riñón hay aproximadamente un millón de estructuras diminutas, llamadas nefrones, que filtran la sangre. Estos, eliminan los productos de desecho y el exceso de agua, que se transforma en orina. La orina fluye a través de unos tubos llamados uréteres hacia la vejiga, donde se almacena la orina hasta que usted vaya al baño.
La mayoría de las enfermedades renales atacan los nefrones. Este daño causa que los riñones no puedan eliminar desechos. Las causas incluyen problemas genéticos, lesiones o medicamentos. Usted puede correr mayor riesgo de padecer una enfermedad renal si tiene diabetes, presión alta o un familiar cercano con algún problema de los riñones. La enfermedad renal crónica va dañando los nefrones de a poco con el transcurso del tiempo. Otras enfermedades de los riñones pueden incluir:
- Cáncer
- Quistes
- Piedras
- Infecciones
En este artículo hablaremos del Cáncer de Riñón:
El cáncer se origina cuando las células normales en un riñón o en ambos cambian y crecen sin control, y forman una masa llamada tumor. Un tumor puede ser canceroso o benigno. Un tumor canceroso es maligno, lo que significa que puede diseminarse a otras partes del cuerpo. Un tumor benigno es un tumor que no se diseminará.
El cáncer de riñón es el sexto tipo más frecuente de cáncer y la décima causa más común de muerte por cáncer en los hombres y la octava causa más común de muerte por cáncer en las mujeres.
A menudo, el cáncer de riñón se detecta cuando una persona se hace una radiografía o un ultrasonido por otras causas. En sus estadios tempranos, el cáncer de riñón no provoca dolor. Por lo tanto, los síntomas de la patología suelen aparecer cuando el tumor es grande y comienza a afectar los órganos cercanos.
Las personas con cáncer de riñón pueden experimentar los siguientes síntomas o signos. A veces, las personas con este tipo de cáncer no presentan ninguno de estos síntomas. O bien, estos síntomas pueden producirse por otra afección que no sea cáncer.
- Sangre en la orina
- Dolor o presión en el costado o la espalda
- Una masa o bulto en el costado o la espalda
- Hinchazón de los tobillos y las piernas
- Presión arterial alta o anemia (recuento bajo de glóbulos rojos)
- Cansancio
- Pérdida del apetito
- Pérdida de peso sin razón aparente
- Fiebre recurrente que no está relacionada con un resfriado, gripe u otra infección
- En los hombres, el desarrollo rápido de un grupo de venas agrandadas, conocido como varicocele, alrededor de un testículo.
Si usted está preocupado acerca de uno o más de los síntomas o signos de esta lista, hable con su médico. Su médico le preguntará cuánto tiempo ha estado experimentando los síntomas y con qué frecuencia, además de otras preguntas y determinará el tipo de exámenes que habrá de practicar para encontrar la causa exacta del problema.
Algunos factores de riesgo y cultura de prevención:
Un factor de riesgo es todo aquello que aumenta la probabilidad de que una persona desarrolle cáncer. Si bien, a menudo, los factores de riesgo influyen en el desarrollo del cáncer, la mayoría no provoca cáncer en forma directa. Algunas personas que tienen varios factores de riesgo nunca desarrollan cáncer, mientras que sí lo hacen otras personas sin factores de riesgo conocidos. Sin embargo, el hecho de conocer sus factores de riesgo y hablar con su médico al respecto puede ayudarle a tomar decisiones más informadas sobre el estilo de vida y la atención médica.
Los siguientes factores pueden elevar el riesgo que tiene una persona de desarrollar cáncer de riñón:
Tabaquismo. El tabaquismo duplica el riesgo de desarrollar cáncer de riñón y se cree que provoca aproximadamente el 30% de los cánceres de riñón en los hombres y aproximadamente el 25% en las mujeres.
Género. Los hombres tienen de dos a tres veces más posibilidades que las mujeres de desarrollar cáncer de riñón.
Raza. Las personas de raza negra tienen tasas mayores de cáncer de riñón.
Edad. El cáncer de riñón se halla habitualmente en adultos y se suele diagnosticar entre los 50 y 70 años.
Nutrición y control de peso. Las investigaciones a menudo han demostrado una asociación entre el cáncer de riñón y la obesidad, la cual generalmente es causada por muchos años de consumo de una dieta con alto contenido de grasas.
Presión arterial alta. Los hombres con presión arterial alta, también llamada hipertensión, pueden ser más propensos a desarrollar cáncer de riñón.
Sobredosis de ciertos medicamentos. El uso no controlado de analgésicos que contengan fenacetina, los diuréticos y los analgésicos como la aspirina, el acetaminofén y el ibuprofeno también se han relacionado con el cáncer de riñón.
Exposición al cadmio. Algunos estudios han demostrado una relación entre el cáncer de riñón y la exposición al metal cadmio. Trabajar con pilas, pinturas, o materiales para soldar también puede aumentar el riesgo de una persona. Los fumadores que estuvieron expuestos al cadmio tienen un riesgo aún mayor.
Diálisis a largo plazo. Los pacientes que reciben diálisis durante un período prolongado pueden desarrollar quistes cancerosos en los riñones. Estas formaciones se suelen detectar en un estadio temprano y con frecuencia se pueden extirpar antes de que el cáncer se disemine.
Antecedentes familiares de cáncer de riñón. Las personas que tienen familiares de primer grado (padres, hermanos, hermanas o hijos) con cáncer de riñón tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Este riesgo aumenta si a más de un miembro de la familia se le ha diagnosticado cáncer de riñón, lo que incluye abuelos, tías, tíos, sobrinas, sobrinos, nietos y primos, y si el diagnóstico de estos miembros de la familia fue antes de los 50 años de edad, si tenían cáncer en ambos riñones, o tuvieron más de un tumor en el mismo riñón. Si le preocupa la existencia del cáncer de riñón en su familia, es importante que obtenga antecedentes familiares exactos y que comparta los resultados con su médico. Al comprender sus antecedentes familiares, usted y su médico pueden tomar medidas para reducir el riesgo y ser proactivo sobre su salud.
Trastornos genéticos específicos. Aunque el cáncer de riñón puede ser hereditario, esa clase de cáncer es poco frecuente, ocurren alrededor del 5% de las veces. Solamente se han encontrado algunos genes específicos que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de riñón, y muchos están vinculados a síndromes genéticos específicos. La mayoría de estas afecciones están asociadas con un tipo específico de cáncer de riñón.
Los investigadores continúan buscando otros factores que causan el cáncer de riñón y lo que las personas pueden hacer para reducir su riesgo personal. Todavía no se conoce lo suficiente acerca del cáncer de riñón para determinar exactamente cómo prevenirlo. No obstante, las personas pueden tomar ciertas medidas para reducir el riesgo, como dejar de fumar, disminuir la presión arterial, controlar el peso corporal y consumir una dieta rica en frutas y vegetales y bajo contenido de grasas. Hable con su médico si le preocupa su riesgo personal de desarrollar este tipo de cáncer.
En nuestro anterior artículo ¿Cómo desintoxicar los riñones? podrá encontrar algunos prácticos y sencillos consejos que le ayudarán a mantener sus riñones trabajando de manera sana y eficiente.