A medida que las personas envejecen es más probable que se presenten problemas urológicos; en vejiga, vías urinarias, insuficiencia renal, próstata, disfunción eréctil, etc. Sin embargo los problemas urológicos y la diabetes tienen una estrecha relación cuando la diabetes causa complicaciones en los vasos sanguíneos y los nervios. Los hombres pueden tener dificultad con la erección o la eyaculación. En los hombres y las mujeres son más frecuentes las infecciones de las vías urinarias y problemas vesicales. Aunque debemos enfatizar que las personas que mantienen su diabetes bajo control pueden disminuir el riesgo de desarrollar de manera precoz estos padecimientos urológicos.
Insuficiencia renal y la diabetes
La enfermedad renal diabética toma años en desarrollarse. En algunas personas, la filtración de los riñones funciona mejor de lo normal durante los primeros años de padecer diabetes.
Con el paso de los años, en las personas que padecen la enfermedad renal, pequeñas cantidades de albúmina (una proteína de la sangre) empiezan a pasar a la orina. Esta primera etapa de CKD (Enfermedad Renal Crónica) se conoce como microalbuminuria. Durante este periodo las funciones de filtración del riñón generalmente permanecen normales.
A medida que la enfermedad progresa, pasa más albúmina a la orina. Esta etapa se puede denominar macroalbuminuria o proteinuria. Mientras aumenta la cantidad de albúmina en la orina, generalmente se deterioran las funciones de filtración de los riñones. El cuerpo retiene algunos materiales de desecho cuando la filtración se deteriora. Mientras progresa el daño renal, frecuentemente aumenta la presión arterial también.
En general, el daño renal rara vez ocurre durante los primeros 10 años de padecer diabetes, y normalmente pasan entre 15 y 25 años antes de que se presente la insuficiencia renal. Las personas que han padecido diabetes por más de 25 años sin presentar signo alguno de insuficiencia renal corren menos riesgo de sufrirla.
Problemas de la vejiga cuando se tiene diabetes
Más de la mitad de las mujeres y hombres con diabetes tienen disfunción vesical debido al daño de los nervios que controlan la función de la vejiga. Entre los problemas de la vejiga más comunes en hombres y mujeres con diabetes se encuentran los siguientes:
- Vejiga hiperactiva. Los nervios dañados podrían enviar señales a la vejiga en el momento inadecuado, haciendo que los músculos se contraigan sin aviso. Los síntomas de la vejiga hiperactiva incluyen
- frecuencia urinaria—orinar más de ocho veces al día o dos o más veces en la noche
- urgencia urinaria—ganas repentinas y fuertes de orinar inmediatamente
- incontinencia urinaria—el goteo de orina que sucede después de que se presentan ganas repentinas y fuertes de orinar
- El control inadecuado de los músculos del esfínter. Los músculos del esfínter rodean la uretra—el tubo que transporta orina desde la vejiga hacia el exterior del cuerpo—y la mantiene cerrada para retener la orina en la vejiga. Si los nervios de los músculos del esfínter se dañan, los músculos pueden aflojarse y permitir el goteo o permanecer cerrados cuando la persona trata de expulsar la orina.
- Retención de orina. En algunas personas, el daño de los nervios evita que los músculos de la vejiga reciban la señal de que es tiempo de orinar o hace que los músculos sean muy débiles y no puedan vaciar la vejiga por completo. Si la vejiga se llena demasiado, puede acumularse la orina y la presión creciente puede dañar los riñones. Si la orina permanece demasiado tiempo en el cuerpo se puede desarrollar una infección en los riñones o la vejiga. La retención urinaria también puede producir incontinencia por rebosamiento, que es el goteo de orina cuando la vejiga está llena y no se vacía por completo.
El diagnóstico de problemas en la vejiga puede incluir tanto el control de la función vesical como el aspecto de la parte interior de la vejiga. Los exámenes pueden incluir radiografías, pruebas urodinámicas para evaluar la función de la vejiga y la cistoscopia.
El tratamiento de los problemas de la vejiga debido a daño nervioso depende del problema específico. Si el problema principal es la retención de orina, el tratamiento puede incluir medicamentos para estimular un mejor vaciado de la vejiga y la práctica de un vaciamiento programado que consiste en orinar en un horario fijo, que ayuda a hacer más eficaz la micción. Las personas a veces necesitan insertarse periódicamente un tubo delgado llamado catéter a través de la uretra para drenar orina de la vejiga. También es útil aprender a saber cuándo está llena la vejiga y cómo masajear la parte inferior del abdomen para vaciar la vejiga por completo. Si el goteo urinario es el problema principal, los medicamentos, el fortalecimiento de los músculos con los ejercicios Kegel y la cirugía pueden ayudar en algunos casos.
Infecciones de las vías urinarias y la diabetes
Cuando las bacterias, usualmente del sistema digestivo, alcanzan las vías urinarias se pueden presentar infecciones. Si las bacterias crecen en la uretra, esta infección se conoce como uretritis. Las bacterias pueden subir por las vías urinarias y causar una infección de la vejiga llamada cistitis. Una infección sin tratarse puede avanzar más adentro del cuerpo y causar pielonefritis, una infección de los riñones. Algunas personas tienen infecciones crónicas o recurrentes de las vías urinarias. Los síntomas de las infecciones de las vías urinarias incluyen:
- Necesidad intensa de orinar
- Dolor agudo o ardor en la vejiga o uretra durante la micción
- Orina turbia o rojiza
- En mujeres, presión sobre el hueso púbico
- En hombres, sensación de llenura en el recto
Si la infección está en los riñones, una persona puede tener náuseas, dolor en la espalda o el costado y fiebre. La micción frecuente puede ser una señal de glucosa alta en la sangre, por lo que se deben analizar los resultados recientes del control de la glucosa en la sangre.
Un proveedor de atención médica pedirá una muestra de orina para analizarla en busca de bacterias y pus. Se pueden realizar pruebas adicionales si el paciente tiene infecciones frecuentes de las vías urinarias. Una ecografía proporciona imágenes de las ondas acústicas del eco que rebota de los órganos internos. Una pielografía intravenosa usa un tinte especial para realzar las imágenes radiográficas de las vías urinarias. Se puede realizar también una cistoscopia.
Para prevenir infecciones más graves, son importantes la detección y el tratamiento oportunos. Para erradicar una infección de las vías urinarias, es probable que el proveedor de atención médica recete un tratamiento antibiótico según el tipo de bacteria en la orina. Las infecciones renales son más serias y pueden requerir un tratamiento antibiótico por varias semanas. Tomar grandes cantidades de líquido ayuda a prevenir otra infección.
¿Quién corre más riesgo de desarrollar los problemas urológicos cuando se tiene diabetes?
Los factores de riesgo son afecciones que aumentan las probabilidades de contraer cierta enfermedad. Mientras más factores de riesgo existan, más grandes son las probabilidades de desarrollar esa enfermedad o afección. La neuropatía diabética y los problemas urológicos asociados parecen ser más comunes en personas que:
- Tienen un control inadecuado de la glucosa en la sangre
- Tienen niveles altos de colesterol en la sangre
- Tienen presión arterial alta
- Tienen sobrepeso
- Tienen más de 40 años
- Fuman
- Son físicamente inactivos
¿Se pueden prevenir los padecimientos urológicos asociados con la diabetes?
Las personas con diabetes pueden disminuir el riesgo de tener problemas urológicos al mantener los niveles de glucosa, presión arterial y colesterol en la sangre dentro de los niveles recomendados por el proveedor de atención médica. También se pueden prevenir las complicaciones de la diabetes a largo plazo al mantenerse físicamente activo y en un peso saludable. Para aquellos que fuman, dejar de hacerlo disminuye el riesgo de desarrollar afecciones urológicas debido al daño de los nervios y también ayuda a disminuir otros problemas de salud relacionados con la diabetes, incluidos los ataques al corazón, los derrames cerebrales y la enfermedad renal.
Si padeces diabetes y presentas alguna complicación urológica, acude al Centro Especializado en Urología de inmediato para realizarte un diagnóstico y actuar a tiempo. Recuerda que tu salud es tu mayor riqueza.